Dentro de la múltiple y variada riqueza natural que brinda el Perú, el Parque Nacional del Manu reúne gran parte de su exuberancia en términos de biodiversidad. Por ello, si eres un apasionado de la naturaleza y buscas un destino que te permita desconectarte de la ciudad y que te lleve a un mundo lleno de encantos y sorpresas que ofrece la Amazonía peruana, el Manu es el lugar ideal.

 

Esta importante área protegida, ubicada entre los departamentos de Madre de Dios y Cusco, fue declarada por la Unesco como núcleo de reserva de biósfera en 1977 y, una década después, Patrimonio Natural de la Humanidad. A continuación, te presentamos 6 motivos por los que debes conocer el Parque Nacional del Manu.

 

La mayor biodiversidad del mundo
Reconocida como el área protegida de mayor diversidad biológica del mundo por la Unesco, el Parque Nacional del Manu alberga más de mil especies de aves y cerca de doscientas de mamíferos. Gran parte de esta abundante fauna se debe a su privilegiada ubicación: abarca prácticamente todos los pisos altitudinales, desde la puna cusqueña hasta la planicie amazónica.

 

Un paraíso de aves
Las más de mil especies de aves censadas en el Manu representan al 25 % del total que habitan en América del Sur y alrededor del 10 % de todas las especies del mundo, de acuerdo con el Programa de Áreas Protegidas de Naciones Unidas. Por ello, el parque es uno de los lugares más recomendables para los aficionados a la observación de aves.

 

 

Por su vistosidad, los loros y los guacamayos son las especies más preciadas y también las más amenazadas. El guacamayo rojo, de gran tamaño, es una de las aves más hermosas que se pueden encontrar en este lugar: posee una gran cabeza de plumas anaranjadas combinadas con el azul y verde de sus alas y cola. Entre los loros destaca el de cabeza azul, de solo treinta centímetros de longitud.

 

Gran variedad de flora
Más de veinte mil especies de plantas vasculares -que permiten transportar nutrientes- pueden ser observadas en el Manu. Además, la zona alberga distintas formaciones de vegetación como bosques tropicales, de neblina, enanos y páramos de pajonal andinos.

 

Un tranquilo hábitat para los animales 
Al recorrer algunas zonas aptas para los turistas, podrás descubrir un gran número de reptiles, como los caimanes de seis metros de largo, o mamíferos terrestres y marinos, hasta peces y anfibios.

 

Entre los mamíferos que habitan en el Manu destaca el mono tití, considerado el más pequeño del mundo. Estos primates suelen ser muy amistosos con los visitantes y hasta realizan una que otra travesura.

 

El mono tití es considerado el más pequeño del mundo. Crédito: Enrique Castro-Mendívil / PromPerú.

 

Otra de las especies más queridas y buscadas por los turistas es la nutria gigante o lobo de río. Este divertido y juguetón mamífero lamentablemente se encuentra en peligro de extinción. Anteriormente, el lobo se encontraba en prácticamente todos los ríos de la cuenca amazónica. Ahora, la mayor parte de los que quedan con vida se encuentran dentro del Manu.

 

Restos arqueológicos
El Manu no solo resalta por su encanto natural, sino también por sus valiosos restos arqueológicos. En él se ha encontrado reliquias y vestigios, algunos aún en estudio, que demuestran la presencia humana en este territorio desde tiempos muy antiguos. Los más conocidos son los petroglifos de Patiacolla, considerados los más grandes del Perú. Otro sitio arqueológico importante en esta zona son las ruinas de Mameria.

 

Hogar de los nativos
El Manu alberga diversos grupos étnicos que habitan en su interior y que en su mayoría se mantienen voluntariamente aislados. Los más conocidos son los machiguenga, piro, yora y yaminahua. La relación que mantienen estos pobladores con la modernidad es muy reducida, incluso algunos de ellos jamás han tenido contacto con el mundo exterior.

 

La actividad económica de estas comunidades se limita a la caza, la pesca, la recolección y a una incipiente agricultura. De esta manera, mantienen sus tradiciones ancestrales y estilo de vida silvestre puesto que son las únicas personas autorizadas para explotar los recursos naturales que brinda el parque. Actualmente, son cerca de 50 mil habitantes distribuidos en aproximadamente treinta comunidades

 

 

 

Síguenos a través de nuestras redes sociales
Facebook | Instagram | Twitter | TikTok | YouTube